jueves, 24 de febrero de 2011
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Vives dentro de mi, de mi alma, de mi mente y de mi oscura majestad; vives dentro de mi como una espiga clavada en mi mente, ke me hace recordar el calor de tu amor, el de tu cuerpo, de tu pasión, la roja sangre de tus labios.
Incas tus garras en mi corazón y lo desgarras para luego devorarlo, incas tus colmillos en mi cuello y succionas mi vida por unos pekeños orificios.
Estoy muriendo y mi oscura majestad conmigo; pero no siento dolor, tampoco siento tristeza, solo siento miedo a no poder estar contigo toda la vida, miedo a no poder volver a tocarte, a mirarte a los ojos, miedo a no poder amar de nuevo tu oscuro corazón.
Corazón ¿que no daría por que dejaras de latir, y así dejaras de atormentar mi mente con tus latidos? ¿que no daría por ke se borraran d emi mente todos los recuerdos de este cruel amor? Maldito destino, ke un día nos enfrento, y nos fundio en fuego y pasion para luego nunca mas dejarnos ir, atando nuestras almas la una a la otra, como un cruel juego de los demonios, ahora lloras y tus lágrimas se confunden con las lágrimas ke caen del cielo, los angeles lloran por nosotros, el cielo llora por nuestro miserable amor.
Tu cuerpo ya no vive, al igual ke el mio y solo vivimos en una cascara vacia, un envaca para nuestras desterradas almas oscuras y atormentadas, con ropajes negros ke nos expulsan de la luz, buscamos el momento en el ke nuestros corazónes vuelvan a latir y así poder amarnos, buscamos el cielo en este infierno, y aún te sigo amando con todo mi dolor!
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